Las paletillas se sazonan, se rocían con el vino y se dejan toda la noche a macerar.
Al día siguiente, cortamos las patatas en rodajas gordas y las colocamos en un asador.
Se escurre la carne y se hacen unas incisiones, y en ellas se coloca una picada de ajo, perejil y un chorrito de aceite de oliva y se cubren con las tiras finas de tocino de jamón.
Colocamos la carne sobre las patatas. Cuando esta a media cocción le añadimos el vino que ha salido de la maceración y le damos la vuelta, dejándolo hasta que esté bien dorado