Gestión del conocimiento/Capital intelectual/Qué es el capital intelectual
Capital Intelectual para algunos investigadores involucra factores como: tecnología de la información, conocimientos al interior de la empresa, satisfacción de clientes y empleados, entre otros. Para entender el contexto que abarca el término “Capital Intelectual”, consideremos algunas definiciones y descripciones realizadas por algunos autores.
Stewart (1997), define el Capital Intelectual como, conocimiento, información, propiedad intelectual, experiencia, que puede utilizarse para crear valor. Es fuerza cerebral colectiva. Es difícil de identificar y aún más de distribuir eficazmente. Pero quien lo encuentra y lo explota, triunfa. El mismo autor afirma que en la nueva era, la riqueza es producto del conocimiento. Éste y la información se han convertido en las materias primas fundamentales de la economía y sus productos más importantes.
Para Brooking (1997), el capital intelectual no es nada nuevo, sino que ha estado presente desde el momento en que el primer vendedor estableció una buena relación con un cliente. Lo que ha sucedido en el transcurso de las dos últimas décadas es una explosión en determinadas áreas técnicas clave, incluyendo los medios de comunicación, la tecnología de la información y las comunicaciones, que nos han proporcionado nuevas herramientas con las que hemos edificado una economía global. Muchas de estas herramientas aportan beneficios inmateriales que ahora se dan por descontado, pero que antes no existían, hasta el punto de que la organización no puede funcionar sin ellas. La propiedad de tales herramientas proporciona ventajas competitivas y, por consiguiente, constituyen un activo.
La Multinacional de Seguros Sueca Skandia, pionera en la medición de activos intangibles, define el capital intelectual como la posesión de conocimientos, experiencia aplicada, tecnología organizacional, relaciones con clientes y destrezas profesionales que otorgan a las compañías ventajas competitivas en el mercado.
Según Sveiby (2000), el valor total de mercado de la empresa está formado por el patrimonio visible tangible más tres tipos de activos intangibles: la estructura interna (organización), la estructura externa (los clientes) y las capacidades (las personas), de modo que el valor de mercado de la empresa se puede interpretar como un reflejo directo del Balance Invisible.
En definitiva, El Capital Intelectual lo podemos definir como el conjunto de recursos intangibles de los que dispone la empresa en un determinado momento del tiempo que, pese a no estar reflejados en los estados contables tradicionales, en la actualidad genera valor o tiene potencial de generarlo en el futuro (EUROFORUM, 1998). Los conocimientos de las personas clave de la empresa, la satisfacción de los empleados, el know-how de la empresa, la satisfacción de los clientes, etc., son activos que explican buena parte de la valoración que el mercado concede a una organización y que, sin embargo, no son recogidos en el valor contable de la misma. Identificar y Medir el Capital Intelectual tiene como objeto convertir en visible el activo que genera valor en la organización.
Hemos mencionado reiterativamente el rol que desempeña el conocimiento en la valoración de las empresas, pero ¿cual es el significado de la palabra “valor”?. A continuación daremos una breve explicación desde el punto de vista concreto de los accionistas.
Este tipo de valor está en los activos constituidos por las inversiones, tales como las acciones y los bonos que posea una compañía.
Para entender este concepto manejado por la valorización del mercado, consideraremos el modelo utilizado por Karl Sveiby, quien define el valor de las organizaciones como la suma de sus activos tanto tangibles (medidos de acuerdo a los principios contables tradicionales) como intangibles (recursos asociados al Capital Intelectual). Donde el Valor de mercado es el número de acciones de la empresa multiplicado por su precio en el mercado.
Figura 2. Descomposición del valor de las empresas
Valor de mercado = Activos tangibles+Activos intangibles
(SVEIBY, 2000)
El valor de un negocio se mueve cada vez mas de los activos fijos a los intangibles: Marcas, patentes, franquicias, software, programas de investigación, ideas, experiencia. Hasta ahora empieza a despertar interés en las compañías en medir este activo, que contribuye a crear una brecha cada vez más grande entre el valor contable y el valor de mercado; este cambio es cada vez más dramático en las empresas de amplia base tecnológica (Internet, software, biotecnología etc.). Podemos decir entonces que el factor que marca esta diferencia es el capital intelectual